11.7.07

Inland empire

El cartel decía “El imperio”. La fila para entrar a la sala de cine era de 30 metros y desde que la ví, supuse que por lo menos el 50% de la gente formada se saldría antes de terminar la película. Me equivoqué, en la sala sólo quedamos 15 personas intentando descrifrar la última conclusión que David Lynch nos proponía.

Yo caí en la trampa de Lynch. Me confundí terriblemente, sobre todo con una escena donde tres conejitos, más bien, botargas de conejos, tenían una conversación sin sentido. Sin embargo no salí confundida, la temática de este director, productor, guionista, compositor, (y todos los demás roles que hace en la película) comienza intentando confundir. A eso se dedica, a ver de qué manera le da sentido a lo sinsentido. Y cómo no lo va a lograr si va haciendo a su voluntad la edición de las tomas como un niño que platica sus sueños.

De lo onírico a lo surreal, David Lynch vuelve a confundir, sólo que ahora necesitó tres horas y media. La recomiendo, para jugar a los símbolos, a la hermenéutica, a la interpretación.

ANEXO TRAILER DE YOU TUBE: http://www.youtube.com/watch?v=y4hFEDYmMcM